El panorama político en el Atlántico empieza a agitarse de cara a las elecciones legislativas de 2026. El diputado Camilo Torres Villalba oficializó su candidatura al Senado de la República, una apuesta que busca consolidar la renovación generacional dentro del liberalismo en la región.
Torres Villalba, hijo de la excongresista Martha Villalba, asumirá la bandera política que inicialmente iba a representar su madre. En su presentación, destacó que sus ejes de campaña estarán enfocados en las juventudes, con propuestas para fortalecer la educación, el empleo, la salud mental y la innovación; además de impulsar la regulación de los servicios públicos y el turismo como motor de desarrollo económico.
Al mismo tiempo, la poderosa casa Char, principal fuerza detrás de Cambio Radical en el Caribe, comienza a definir sus fichas para el próximo Congreso. Para el Senado suenan con fuerza los nombres de Gonzalo Baute y el exrepresentante César Lorduy, mientras que para la Cámara de Representantes la apuesta se orienta hacia nuevos liderazgos, como el concejal Estefanel Gutiérrez, Samir Radi y el diputado Welfran Mendoza.
Estos movimientos reflejan la reconfiguración del mapa político en el Atlántico, donde las tradicionales casas políticas buscan mantener su hegemonía frente al surgimiento de nuevos liderazgos. La estrategia de los Char, de respaldar candidaturas sin aparecer directamente en las listas, y el salto de Camilo Torres al Senado, anticipan una contienda intensa en la que la renovación generacional y las alianzas territoriales serán determinantes.
El ajedrez electoral en el Atlántico ya está en marcha, y lo que se define en estas semanas será clave para marcar la ruta hacia 2026.