
Fuente: El Mundo
Rusia ejecutó el mayor ataque con drones registrado hasta la fecha contra varias ciudades de Ucrania, desplegando más de 800 aparatos de manera simultánea. El balance preliminar deja más de diez personas muertas y decenas de heridos.
En Kiev, las autoridades confirmaron al menos tres víctimas mortales, entre ellas un bebé, tras el impacto de los drones en zonas residenciales. Además, un edificio gubernamental resultó incendiado en medio de la ofensiva, generando una fuerte respuesta de los equipos de emergencia.
El ataque, calificado como uno de los más intensos desde el inicio de la invasión rusa en 2022, vuelve a poner de relieve la vulnerabilidad de la infraestructura civil ucraniana frente a las operaciones aéreas de Moscú.