
Fuente: El Mundo.
El gobierno de Estados Unidos ha lanzado una recompensa sin precedentes de $50 millones de dólares por información que conduzca al arresto de Nicolás Maduro, actual líder de Venezuela. Esta acción contundente lo posiciona como un objetivo prioritario en la lucha global contra el narcotráfico, al ser señalado como uno de los mayores traficantes de drogas del mundo.
Las acusaciones detallan que Maduro habría utilizado organizaciones terroristas internacionales, como el Cartel de Sinaloa y el Cartel de los Soles, para orquestar una vasta red de distribución de cocaína. Esta operación ilícita no solo inunda el mercado con drogas mortales, sino que también canaliza recursos significativos hacia estos grupos criminales.
La Administración para el Control de Drogas (DEA) ha documentado incautaciones masivas, con toneladas de cocaína vinculadas directamente a las operaciones de Maduro y sus asociados. Se estima que estas redes de tráfico de drogas representan una fuente vital de financiamiento para los cárteles tanto en Venezuela como en México.
Las autoridades estadounidenses enfatizan que las actividades de Maduro constituyen una amenaza directa a la seguridad nacional, no solo de Estados Unidos sino de la región en general. El mensaje es claro y contundente: no habrá impunidad.
Se insta a cualquier persona con información relevante a contactar a las autoridades, reafirmando el compromiso de que Maduro enfrentará la justicia por sus crímenes.