
Fuente: El Mundo
Vladimir Putin encabezó la conmemoración del Día de la Victoria en Moscú, un evento cargado de simbolismo nacionalista que honró tanto la victoria soviética en la Segunda Guerra Mundial como la actual invasión de Ucrania. En su discurso, Putin enfatizó la “verdad y la justicia” del lado ruso, mientras un desfile militar mostraba el poderío del país.
El desfile, con vehículos blindados y música militar, contó con la presencia de líderes internacionales, incluyendo al presidente chino Xi Jinping, subrayando la importancia geopolítica del evento para Rusia. Esta muestra de apoyo internacional refuerza la posición de Rusia en el escenario mundial.
La ceremonia sirvió como una demostración de fuerza y unidad, reforzando el mensaje de Putin sobre la determinación de Rusia en su actual conflicto. El evento combinó la conmemoración histórica con la afirmación de la política exterior rusa actual.