Fuente: DW en Español.
Las autoridades de Kenia confirmaron el hallazgo de 37 cuerpos en la aldea de Kwa Binzaro, ubicada en el condado costero de Kilifi, en el marco de una investigación sobre la llamada “masacre de Shakahola”. Este trágico suceso se remonta a 2023, cuando más de 430 personas murieron tras ser persuadidas por el líder de una secta cristiana para ayunar hasta la muerte con la promesa de “reunirse con Jesucristo”.
Investigación y exhumaciones
Las exhumaciones comenzaron el 21 de agosto de 2025 y se llevaron a cabo con gran precaución para preservar las evidencias. Hasta ahora, se han identificado al menos 27 posibles fosas comunes, de las cuales 20 ya han sido abiertas. Además, se han encontrado 54 partes corporales esparcidas en las cercanías, posiblemente removidas por animales salvajes, que también serán sometidas a pruebas de ADN.
Las autoridades han instado a las familias de personas desaparecidas a acudir al hospital subcondado de Malindi para aportar muestras genéticas, con el objetivo de identificar a las víctimas y esclarecer los hechos.
Contexto y riesgos de las sectas
Este caso ha puesto de manifiesto los peligros asociados con las sectas que promueven prácticas extremas. La manipulación psicológica y la promesa de salvación han llevado a numerosas personas a poner en riesgo su vida, lo que subraya la importancia de la vigilancia y la intervención temprana para proteger a comunidades vulnerables.
Las autoridades kenianas continúan investigando el caso, con el objetivo de prevenir futuros incidentes y garantizar justicia para las víctimas de esta trágica masacre.