
Fuente: prensa Fedegan
La paz y la estabilidad en el campo colombiano se ven seriamente comprometidas, especialmente para los ganaderos de los municipios de La Argentina y La Plata, en el departamento del Huila.
Estos productores se encuentran bajo un asedio constante por parte de grupos de presuntos “tierreros” y organizaciones terroristas, que están generando una crisis de orden público sin precedentes en la región.
La situación es tan alarmante que, según denuncias, las autoridades municipales no se comprometen a brindar apoyo, y la Fuerza Pública no asume su responsabilidad ante las reiteradas invasiones de fincas ganaderas.
Los propietarios de los predios viven en un estado de zozobra, recibiendo mensajes de audio con amenazas directas y explícitas por parte de los cabecillas de estos grupos. Audios que circulan entre los afectados revelan la crudeza de las intimidaciones: “Si ustedes como dueños nos mandan desalojar… eso se va a unir mucha gente, esto se va a volver un problema, usted sabe cómo está la situación por acá”, advierten los invasores.
En otro mensaje, la presión se intensifica con exigencias de servicios básicos y la amenaza de una confrontación masiva: “Si no nos colocan el agua las cosas van a ser peor para usted y para todos… Los campesinos no son ni uno ni dos ni tres ahí hay un apoyo de 300 campesinos y lo que nos toque hacer lo hacemos”.
Estas grabaciones no solo reflejan la audacia de los agresores, sino también la vulnerabilidad de los ganaderos, quienes se sienten desamparados frente a una amenaza que crece día a día.
La Federación Colombiana de Ganaderos (FEDEGÁN) ha elevado la voz de alarma, denunciando públicamente esta grave situación. Las redes sociales se han convertido en un canal para visibilizar el drama que enfrentan estos productores. Juan Felipe Lafaurie, desde su cuenta en X (anteriormente Twitter), ha compartido detalles y enlaces, replicados también en Facebook, donde se evidencia la magnitud de la crisis. FEDEGÁN, por su parte, ha utilizado sus plataformas para denunciar el acoso y la inacción de las autoridades.
Esta escalada de violencia y las invasiones de tierras no solo representan una amenaza para la propiedad privada y la seguridad de las familias ganaderas, sino que también ponen en riesgo la producción de alimentos y la estabilidad económica de la región.
Es URGENTE que las autoridades nacionales y locales tomen medidas contundentes para restablecer el orden, proteger a los ciudadanos y garantizar que quienes producen la tierra puedan hacerlo sin temor a la extorsión o la violencia. La vida y el patrimonio de los ganaderos colombianos dependen de una acción inmediata y decidida.
Para más información, se puede contactar al general (r) Fernando Murillo Orrego, estratega de Seguridad de FEDEGÁN, al número 3222728560.