¿Como Marlboro paso de ser una tabacalera a una gigante tecnológica?.

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La industria tabacalera, históricamente dominada por gigantes como Marlboro y Chesterfield, enfrento un declive significativo en las ventas de cigarrillos tradicionales.

Este descenso se debe a una combinación de factores, incluyendo el aumento de impuestos, las prohibiciones de fumar en espacios públicos y las impactantes advertencias gráficas en los paquetes. La presión sobre estas compañías es innegable.

Para contrarrestar esta tendencia, las empresas han comenzado a explorar nuevas vías de negocio. Una de las estrategias clave ha sido el desarrollo de dispositivos de tabaco calentado, como el “AOS”, que calienta el tabaco sin combustión, eliminando así el humo y las cenizas. Este tipo de productos se ha lanzado en mercados receptivos como Japón e Italia.

Además, la inversión en cigarrillos electrónicos ha sido una pieza fundamental de su transformación. Un ejemplo claro es la inversión en Juul, una compañía que llegó a dominar el mercado de cigarrillos electrónicos en Estados Unidos. Sin embargo, estas inversiones no han estado exentas de desafíos, enfrentando investigaciones por publicidad engañosa y uso por parte de menores.

La diversificación también incluye el lanzamiento de sus propios productos de vapeo sofisticados, diseñados con un enfoque en la seguridad y la experiencia del usuario. Otro movimiento estratégico ha sido la adquisición de empresas como Swedish Match, conocida por sus bolsitas de nicotina “Zyn”. Estos productos sin humo ni tabaco están ganando popularidad, especialmente entre los jóvenes.

En esencia, la industria tabacalera está experimentando una metamorfosis, de ser fabricantes de cigarrillos, a ser una compañía de “tecnología de nicotina”, con una parte creciente de sus ingresos proveniente de alternativas sin humo. Más del 40% de sus ganancias ya provienen de estos nuevos productos, marcando un cambio fundamental en su modelo de negocio.