Asi fue la llegada del féretro de Miguel Uribe al Capitolio.

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Fuente: Noticias Caracol.

La nación colombiana se unió en un solemne acto de despedida al precandidato presidencial y senador Miguel Uribe Turbay. El Capitolio Nacional de Colombia fue el escenario de este emotivo homenaje póstumo, donde familiares, dignatarios y ciudadanos rindieron tributo a una figura política cuyo legado fue recordado con profundo respeto y dolor. La ceremonia, marcada por la solemnidad y la unidad, destacó no solo la trayectoria de Uribe Turbay, sino también el llamado a la paz y la justicia en un momento de luto nacional.

El video captura el inicio de esta solemne jornada con la llegada del féretro de Miguel Uribe Turbay al Capitolio. Cubierto con la bandera de Colombia, símbolo de su servicio y patriotismo, el ataúd fue escoltado por oficiales de policía y acompañado por sus seres más cercanos, incluyendo a sus hijas y a María Claudia Tarazona. Este momento inicial estableció el tono de la jornada, una mezcla de dolor profundo y un reconocimiento a su contribución al país.

Una vez en el Capitolio, el féretro fue llevado al histórico Salón Elíptico, donde permanecería en “cámara ardiente” hasta el mediodía del miércoles. Este acto tradicional permitió a amigos, colegas y al público en general presentar sus respetos, muchos de ellos portando pañuelos blancos en señal de luto y unidad. La presencia de su esposa, María Claudia Tarazona, su padre, Miguel Uribe Londoño, y su hermana, María Carolina Hoyos Turbay, subrayó el profundo impacto de su partida en el ámbito familiar.

El homenaje estuvo enriquecido por las intervenciones de importantes figuras políticas. Tras la entonación del himno nacional, la vicepresidenta del Senado, la Dra. Ana Paola Agudelo, expresó el sentir de la nación al lamentar el “magnicidio” y hacer un vehemente llamado a la justicia y a la unidad frente a la violencia. De igual forma, el presidente de la Cámara de Representantes, el Dr. Julián David López Tenorio, extendió sus condolencias y enfatizó la necesidad de una postura firme contra la violencia. Estas palabras resonaron como un eco del dolor y la esperanza de un país.

Un momento particularmente conmovedor fue el mensaje de María Claudia Tarazona. Con una voz que transmitía entereza y un profundo sentido de propósito, instó a los colombianos a continuar trabajando por un país mejor, dejando a un lado la venganza por la pérdida de Miguel. Este llamado a la paz y la reconciliación, reiterado por el Padre Juan Diego Cadena durante la ceremonia religiosa, se convirtió en el eje central del acto, culminando con un minuto de silencio y un clamor generalizado por la paz.

La “cámara ardiente” se mantuvo abierta al público para que la ciudadanía pudiera despedirse de Miguel Uribe Turbay. La misa fúnebre, presidida por el Cardenal Rueda, se llevaría a cabo el miércoles a las 12 PM en la Catedral Primada, marcando el cierre de este período de luto nacional. Este homenaje no solo fue una despedida, sino también un recordatorio de los ideales por los que luchó y un llamado a la unidad para el futuro de Colombia.