ANDEG pide reglas claras y soluciones urgentes para evitar crisis en el sector eléctrico.

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La Asociación Nacional de Empresas Generadoras (ANDEG) advirtió que el sector eléctrico colombiano atraviesa un momento crítico que requiere decisiones inmediatas y reglas de juego claras para garantizar la seguridad energética del país. El llamado se hizo en el marco de la XII edición del Foro Energético de la agremiación, que reunió en Barranquilla a más de 360 empresarios, expertos y representantes del Gobierno Nacional.

Durante el encuentro, Alejandro Castañeda, presidente ejecutivo de ANDEG, alertó sobre las falencias de la subasta de Cargo por Confiabilidad de 2024, la cual no logró adjudicar la energía firme necesaria para el mediano plazo. Según sus estimaciones, apenas un 25 % de los proyectos adjudicados entrarían realmente en operación, mientras que la asignación al parque térmico fue insuficiente.

“La nueva subasta debe garantizar al menos 2.500 MW de capacidad, de los cuales 800 MW deberían provenir de plantas térmicas, que son fundamentales para la confiabilidad del sistema”, señaló Castañeda.

El dirigente gremial también advirtió sobre el riesgo de un “apagón financiero” en el sector, debido a la intervención de la empresa Air-e y los retrasos en los giros de subsidios por parte del Ministerio de Hacienda. Esto compromete la liquidez para la compra de combustibles y la operación de las plantas térmicas, indispensables en épocas de baja hidrología.

El Caribe, epicentro energético del país

El foro resaltó la importancia estratégica de la región Caribe, que concentra el 80 % del potencial solar y eólico de Colombia, produce el 90 % del carbón térmico y el 25 % del gas nacional. No obstante, la zona enfrenta retos como la pobreza energética y la falta de modernización de la infraestructura.

En ese sentido, ANDEG insistió en la necesidad de avanzar hacia una matriz energética complementaria, que reconozca el papel de todas las tecnologías, incluyendo las térmicas y el carbón. Sobre este último, se subrayó que el problema no es el combustible, sino las emisiones, y que existen tecnologías como el CCUS para hacer más sostenible su uso.

Transición con sostenibilidad financiera

La Asociación concluyó que la transición energética de Colombia debe ser responsable, viable y sostenible en lo financiero. Para ello, pidió fortalecer la institucionalidad, dar estabilidad regulatoria y construir una hoja de ruta clara que fomente la inversión y asegure el suministro eléctrico para los próximos años.