Trump Amenaza a España con Aranceles por el Gasto en Defensa: ¿De Cuánto Podría Ser el Castigo?

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El presidente Donald Trump ha intensificado su ofensiva verbal contra España, amenazando con un “castigo arancelario” por no elevar el gasto en defensa al 5% del PIB, como acordó la OTAN en junio. En una rueda de prensa en la Casa Blanca, Trump no especificó el porcentaje exacto de los aranceles, limitándose a afirmar: “Estoy pensando en darles un castigo comercial a través de aranceles por lo que hicieron, y creo que lo haré”. Sin embargo, en declaraciones previas durante el verano, el mandatario ya había advertido que podría “duplicar” los aranceles existentes, una táctica que evoca sus políticas proteccionistas del primer mandato.

El contexto de esta amenaza se remonta a la cumbre de la OTAN en La Haya, donde los 32 aliados se comprometieron a aumentar el gasto militar del 2% al 5% del PIB para 2035, en respuesta a la guerra en Ucrania y las tensiones globales. España, bajo el gobierno de Pedro Sánchez, fue la excepción: negoció una flexibilidad para limitarse al 2,1% del PIB, argumentando que este nivel es “suficiente y realista” para preservar el estado del bienestar, evitando recortes en sanidad o educación que costarían unos 80.000 millones de euros anuales adicionales. Sánchez respaldó su postura con una carta del secretario general de la OTAN, Mark Rutte, que avala esta “flexibilidad” siempre que se cumplan los objetivos de capacidades militares.

Trump, fiel a su estilo transaccional, ve en esta decisión una “falta de respeto increíble” a la alianza y a Estados Unidos, que asume el grueso del gasto (casi 1 billón de dólares anuales). “Son el único país que no subió su número al 5%”, recriminó, insinuando que España busca un “pase gratis” mientras se beneficia de bases como Rota y Morón, donde miles de soldados estadounidenses operan. Aunque la semana pasada flotó la idea de expulsar a España de la OTAN —una medida legalmente inviable, ya que el tratado solo permite salidas voluntarias—, este martes optó por el arma económica.

Sobre el monto del arancel, Trump no ha dado cifras concretas en su última intervención, pero el panorama comercial actual ofrece pistas. Desde finales de agosto, las exportaciones españolas a EE.UU. —valoradas en unos 15.000 millones de euros anuales, con productos como vino, aceite de oliva y automóviles— ya enfrentan aranceles generales del 15%, fruto de un acuerdo entre la Comisión Europea y Washington que establece este nivel como “techo” temporal. Fuentes cercanas al equipo de Trump sugieren que el “duplicado” mencionado podría elevarlos al 30%, una represalia selectiva que escalaría las tensiones bilaterales y podría violar normas de la OMC, similar a la guerra comercial de 2018 cuando impuso gravámenes del 25% al acero europeo.

En Madrid, el Gobierno minimiza el riesgo: “España es un miembro comprometido de la OTAN y cumple con sus obligaciones”, reiteró un portavoz de Moncloa, destacando contribuciones en misiones y compras de armamento estadounidense. Críticos europeos, como la primera ministra danesa Mette Frederiksen, ven la exención española como “injusta”, mientras la oposición conservadora en España acusa a Sánchez de aislar al país.

Con una tregua comercial UE-EE.UU. que expira en julio de 2026, el tiempo corre en contra. Analistas dudan de que Trump materialice un arancel tan alto sin negociaciones, pero advierten: “Es su forma de presionar; el 30% sería devastador para exportadores españoles”. Por ahora, la retórica domina, pero el tablero transatlántico se tensa: ¿cederá Sánchez o escalará Trump su “castigo”? La reunión de ministros de Defensa de la OTAN en Bruselas este miércoles podría ofrecer primeras señales.